La amante alemana quiere ver a su esclava mamando. Porque ha preparado una sorpresa muy especial para el otro esclavo. Se supone que debe tragarse su propio semen después de que otro esclavo le coma la polla. Porque esto es lo que la dominatriz obliga a hacer a los dos sumisos. Esto es lo que le gusta a la mujer dominante con botas sobre la rodilla. Debido a que la guarra guarra siempre quiso usar a sus esclavos para este propósito, ahora finalmente ha llegado el momento del porno BDSM alemán.
Filmado en privado en:
