El joven visita a la anciana Jill Summer en su casa. Porque quiere dejar que la abuela tetona ponga las cartas por él. Al chico no le ha ido tan bien desde hace algún tiempo, ni siquiera con las mujeres. Pero la mujer madura de pelo corto no está preocupada, al contrario. Porque la abuela gordita usa sus conocimientos de las cartas incluso para seducir a la joven polla para que se la folle.
Filmado en privado en:
Dresde
Artistas aficionados:
